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antiguo, porque lá mayor parte de las betas que encuentra, y el mismo no está travesado mas que por las betas de hierro oxidulado y de hierro oxidado hematito.

Se encuentran substancias de cobre en rayos esparcidos en masas y en camas, aunque generalmente̱ sean en betas ó que hagan parte de otras betas metálicas, ó petrosas. El cobre llamado bituminoso de la Turinge y del pais de Mansfeld, está en el último caso, y el cobre azulado de Chessy cerca de Lion, se halla en el primero.

La substancia de cobre de Herrengrand, citada por M. Esmarck, forma tres bancos en un boquete compuesto de cuarzo, feldespato y de mica.

Se encuentra el cobre azulado, y particularmente el cobre malaquita, en diferentes suertes de terrenos; en las esquitas betuminosas, en ciertos asperones, etc.; penetran y pasan los huesos, y las maderas fosiles: parece segun se ve que son posteriores å las otras substancias de cobre.

Ensayos fabriles de las minas de cobre.

Se principia formando una muestra que pueda representar la masa con la que se quiere conocer su riqueza en cobre; para esto es necesario tomar fragmentos en diferentes puntos, reunirlos y pesarlos juntos, y tomar de esta mezcla las cantidades sobre las cuales se quiera operar. En seguida es necesario reconocer, calentando la substancia en el soplete, si contiene azúfre, ó arsénico, ó ambas cosas á la vez. En este último caso, que se presenta frecuentemente, se mezcla la substancia de que se hace la prueba, con

la mitad de su peso, de aserraduras de madera, ó bien con aceite, ó aceite y aserraduras (el aceite ofrece la ventaja de hacer penetrar el carbono en todas las partes). Se calienta la mezcla en un crisol hasta el despejo total de los vapores arsenicales; se aparta del fuego, se machaca el resíduo en un almirez de hierro, hasta tanto que se haya reducido á polvo muy fino; este polvo se tuesta en un tiesto expreso para el efecto, meneándolo de contínuo para hacer quemar el azúfre y el carbon; se mezcla bien exactamente el resíduo de esta calcinacion con la mitad de su peso, de borrax derretido y pulverizado, un duodécimo de humo de imprenta ó polvos de marfil y algunas gotas de aceite para aglomerar el todo. Se amontona esta mezcla en un crisol del que se embarra su tapadera.

Se coloca el crisal en la fragua ó en hornillo bueno de viento, desde luego se calienta muy lentamente y por grados, hasta el rojo blanco; se mantiene en esta temperatura durante unos veinte minutos, se deja enfriar, y despues se rompe la masa, y se halla en ella un boton de cobre metálico; su color y su maleabilidad indican la calidad de la mina; se debe copelar con plomo, para asegurarse si contiene ó no alguna parte de oro ó plata. (V. los artículos ENSAYO Y COPELACION).

Si en el primer ensayo en el soplete ha sido indicada solamente la presencia del azúfre, la primera calcinacion será enteramente inútil.

Si la substancia no contuviese ni azúfre ni arsénico, se hará desecar, y despues se tratará directamente por el borrax, el negro y el aceite. En Francia ensayan generalmente las minas de cobre, pasando los metales por varios fuegos, y por una infusion con 3 partes de

flujo negro: entonces el peso del boton metálico indica la riqueza de la substancia.

La análisis por la via húmeda es mucho mas exacta, pero exije mucho mas tiempo y cuidado.

Se elimina fácilmente el azúfre y la sílice, por medio de los ácidos que no disuelven estas substancias. Los óxidos metálicos disueltos, se separan en seguida por los reactivos que les son propios, y el cobre se precipita de la solucion en estado de óxido negro ó de metal puro; 100 partes de cobre metálico están representadas por 125 de óxido negro ó deutóxido.

Antes de librarse à la análisis exacta de una subs tancia, se debe buscar por algunos ensayos prelimi→ nares, cuales son las substancias que entran en su composicion. Se observan grandes composiciones en ge→ neral.

Si se debe operar en una mina de cobre sulfurado que no contenga ni plata ni plomo, se pesarán exactamente 100 gramos, por ejemplo, de substancia pulverizada; se pondrán en contacto con el ácido hydro→ clórico que se calentará, hasta la ebullicion; se mantendrá la temperatura en este grado, añadiéndole de cuando en cuando algunas gotas de ácido nítrico, hasta tanto que toda la accion de la parte disolvente del líquido haya cesado.

La porcion de substancias insolubles mas ligeras que quedan en suspension en el licor, contienen la mayor parte de azúfre, que se obtiene por decantacion, se recoge en un filtro, en donde se lava y despues se seca; se toma en seguida el peso, y la pérdida que tiene quemándola en un tiesto, indica la cantidad de azúfre que contenia.

El resíduo incombustible tratado por el ácido hidro

clórico, deja un depósito insoluble que se debe reunir al primero. Se reunen las soluciones obtenidas por el ácido hidroclórico, y se descomponen por el sub-carbonato de potasa. El precipitado que este reactivo forma, lavado con agua clara se trata en seguida por el amoníaco, en el cual se deslia para hacer disolver el cobre oxidado; se renueva este disolvente diferentes veces, hasta tanto que tome un color mas azul, lo que indica que ya no hay mas cobre á disolver.

Todo el óxido de cobre teniéndose asi en solucion en los lavados por el amoníaco, se reune, se precipita el cobre en estado de óxido negro añadiendo un poco de potasa cáustica, haciendo hervir y concentrar el líquido, se separa el precipitado despues de haberlo desleido en el agua y recojido en un filtro; se lava, se hace secar, y despues se pesa.

El resíduo no disuelto por el amoníaco está formado de óxido de hierro, y tal vez de una poca de alumina que se hace disolver en la potasa cáustica para obtener solamente el óxido de hierro.

En fin, la porcion insoluble en el ácido hidroclórico, apenas contiene otra cosa mas, que sílice.

Análisis de los minerales que contienen además del cobre, hierro y azúfre, plata, plomo y antimonio.

Para analizar estos minerales se principia reduciéndolos á polvo, despues se hace resistir debajo del ácido nítrico, del que se añaden sucesivamente nuevas porciones, hasta que no disuelva mas; se reunen las soluciones y se precipita la plata bajo forma de clorúco vertiendo en exceso dentro el muriato de sosa.

El ácido nítrico, resistiendo sobre el azúfre deter

mina la formacion del ácido sulfúrico, que se une al óxido de plomo para formar sulfato insoluble; y este queda mezclado con el soroque. Si queda mitrato de plomo al estado de sulfato insoluble, añadiendo en el líquido, separado del cloruro de plata, una solucion de sulfato de sosa.

El licor claro, concentrado se dilata desde luego con un gran exceso de amoníaco, que disuelve solo el cobre, dejando precipitar el óxido de hierro; la alúmina y la potasa cáustica, separa el hierro de este dxido terroso.

La parte insoluble en el ácido nítrico está puesta en digestion en el ácido hidroclórico, que lo disuelve todo, excepto el azúfre, la sílice, y la alumina.

Los minerales de óxido de cobre se analizan haciéndoles disolver en el ácido mítrico, saturando las soluciones por el amoníaco, en donde se le añade una porcion bastante grande para disolver todo el cobre, eliminando el hierro.

El carbonato de cobre se analiza calcinándolo en un crisol cubierto; la pérdida indica la proporcion de agua y de ácido carbónico. Una otra parte tratada por el ácido sulfúrico, hace conocer por la pérdida total el peso del ácido carbónico solo; en fin el cebre disuelto por el ácido sulfúrico le precipita por medio de una lámina de zinc.

Los minerales de arseniato de cobre se analizan desecándolos desde luego á una temperatura moderada; en seguida se deslian en el ácido nítrico, que los disuelve enteramente. Se añade á la solucion nitrato de plomo igualmente disuelto, hasta tanto que no ccasione mas precipitado; el depósito que se forma estando recojido el líquido claro, se concentra casi à

TOMO VIII

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