Si la barra es tan rica de oro que contenga de este metal mas de la mitad de su peso, los gastos de en

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saye suben á 4 reales por marco. Asi se ve, por los ejemplos que acabamos de poner, que el particular que entrega su plata en las cajas provinciales de Mé

jico, para cambiarla por moneda, paga al gobierno,

en el primer caso, 12 y en el 2o, 19 por ciento, Este impuesto es el que excita á los mineros á la extraccion fraudulenta de los metales preciosos. A pesar de la experiencia de tantos siglos, todavía la corte de Madrid ha tanteado mas de una vez aumentar + el derecho de señoreage, sin hacerse cargo de que esta imprudente determinacion debia desanimar á los particulares de llevar sus metales á la casa de moneda. Con· los impuestos sobre el oro y la plata sucede como con el beneficio que el gobierno busca en la venta del azogue; el laborio de las minas ganará á proporcion que se disminuyan estos impuestos, y que el azogue, tan indispensable para la amalgamacion, se venda mas barato. Es de admirar que un escritor ** justamente celebrado, que ha tenido las ideas mas sanas acerca del cambio de los metales, haya abrazado la defensa de los derechos de señoreage y de la casa de moneda.

Supuesto cuanto dejamos dicho en este capítulo, es casi escusado el tratar la cuestion de si el producto de

*

Representacion de la Minería de Nueva-España, sobre la doble exaccion del señoreage, de 1766.

** Adam Smith, tom. 1, lib. iv, cap. ví.

las minas de Méjico ha llegado á su máximum, ó si es probable que se aumentará todavía en los siglos futuros. Hemos visto que tres distritos de minas, esto es, los de Guanajuato, Catorce y Zacatecas, dan por sí solos mas de la mitad de toda la plata de NuevaEspaña, y que casi la cuarta parte sale de la sola veta de Guanajuato. La mina de la Valenciana, que solo hace cuarenta años que existe, ha dado algunas veces ella sola, en un año, tanta plata como todo el reino del Perú. Hace solo 30 años que se empezaron á beneficiar las vetas del Real de Catorce, y sin embargo, su 'descubrimiento ha aumentado casi en una sexta parte el producto metálico de Méjico. Si se considera el extenso terreno que ocupan las Cordilleras, y el inmenso número de criaderos que aun no se han empezado á poner en labor **, se concibe que la Nueva-España, con mejor gobierno, y habitada por un pueblo industrioso, podrá con el tiempo dar ella sola, en oro y plata, los 163 millones de pesetas que actualmente produce toda la América. En el espacio de cien años, el producto anual del laborio de las minas mejicanas ha subido, desde cinco á 22 millones de pesos. El no presentar el Perú igual aumento de riquezas consiste en que hace siglos que no ha tenido aumento la poblacion de aquel desgraciado pais; en que estando aun peor gobernado que Méjico, ha encontrado allí la industria todavía

mayores obstáculos que vencer, y en que ademas de eso la naturaleza ha depositado en el Perú los metales preciosos á enormes alturas, y en sitios donde el laborio sale sumamente costoso á causa de la carestía de los mantenimientos. En general, la abundancia de plata es tal en la cadena de los Andes, que reflexionando acerca del número de criaderos que aun están intactos, ó que solo se los ha empezado á trabajar muy superficialmente, parece que podria creerse que apenas han comenzado los europeos gozar del inagotable fondo de riquezas que encierra el NuevoMundo.

á

Si fijamos la vista en el distrito de las minas de Guanajuato, el cual en el pequeño espacio de algunos millares de metros cuadrados, da anualmente la 7a ú 8a parte de toda la plata americana, se verá que los 550,000 marcos que se sacan todos los años de la famosa veta madre, son el producto de solas dos minas, á saber, la del conde de Valenciana y la del marques de Rayas, y que mas de los de esta veta aun estan intactos. Con todo es muy probable que reuniendo las dos minas de Fraustros y de Mellado, y desaguándolas, se formaria una mina comparable en riqueza con la dela Valenciana. Hace mucho tiempo que corre, entre todas las personas instruidas que habitan los principales reales de minas, la opinion, de que la NuevaEspaña acaso no produce la 3a parte de los metales preciosos que podria en circunstancias políticas mas felices. La misma opinion se dió por sentada en una

memoria que los diputados del cuerpo de minería presentaron al rey, en 1774, la cual está escrita con el mayor tino y conocimiento de aquellos parages. La Europa se veria inundada de metales preciosos, si á un tiempo se emprendiese, con todos los medios que ofrecen los adelantamientos hechos en el arte de la minería, el laborío de los criaderos de Bolaños, Batopilas, Sombrerete, Rosario, Pachuca, Moran, Zultepec, Chihuahua, y tantos otros que han tenido desde antiguo una merecida celebridad. No. ignoro que hablando asi, me pongo en oposicion directa con los autores de muchas obras de economía política, que afirman, que las minas de América estan unas apuradas y otras demasiado profundas para poderlas beneficiar con fruto. Es cierto que los gastos de laborío de la mina de Valenciana se han duplicado en el espacio de diez años; pero la utilidad de los accionistas ha sido siempre la misma, y este aumento de gastos viene mas bien de la mala direccion de los planes, que de la profundidad de los tiros. No se tiene presente que las famosas minas de Yauricocha ó de Pasco en el Perú, que anualmente dan mas de 200,000 marcos de plata, no tienen todavía sino de 30 á 40 metros de profundidad. Me parece superfluo impugnar unas opiniones que estan en contradiccion con los muchos hechos que he reunido en este capítulo; y no se extrañará la extremada ligereza con que se juzga en Europa del estado de los laborios del Nuevo Continente, si se considera la poca exacti

tud que los mas célebres escritores políticos han puesto. en sus investigaciones acerca del estado de las minas de su misma patria.

Pero ¿cual es la proporcion del producto de las minas de Méjico con el de las demas colonias españolas? Para esto examinaremos sucesivamente las riquezas del Perú, de Chile, de Buenos-Aires y de la Nueva-Granada. Es sabido que las otras grandes divisiones, á saber las cuatro capitanías generales de Guatemala, la Habana, Puertorico y Caracas no tienen minas en laborío. Yo no seguiré los datos vagos é incompletos que se encuentran en muchas obras modernas, ni discutiré sino lo que he podido yo mismo sacar de los documentos de oficio que he podido conseguir se me comuniquen.

I. En la casa de moneda de Lima han entrado:

De1754 á 1772, 6,102,139 marcos de plata, y 129,080 marcos de oro. 1772-1791, 8,478,367

80,846

El valor del oro y de la plata * ha subido, en la primera de estas dos épocas á 68,944,622 pesos, y en la 2", á 85,434,849, lo cual hace por año comun', un valor de

De 1754 á 1772, en oro y plata, 3,830,000 pesos,

1772-1791,

4,496,000

El producto del oro se ha disminuido, mientras

Unanne, Guia política del Perú, 1793, p. 45.