noseo y roze del servicio ordinario, se puede valuar, con M. Forbonnais y otros escritores de economía política, la cantidad de metales preciosos que desaparecen en Europa, ó que se convierten en vajilla y galones, por un tercio de la masa total no absorvida por el comercio de Asia, es decir, cosa de seis millones de pesos al año.

1

Por otra parte, las minas de Europa y de la Siberia dan anualmente cerca de cuatro millones de pesos. Segun estos cálculos, que por su naturaleza no pueden ser sino de aproximacion, el aumento del numerario en oro y plata en Europa no parece ser sino de 15. millones de pesos, ó 78,700,000 libras tornesas. Las personas que han habitado largo tiempo el norte y el este de la Europa, y que han estudiado con atencion el curso de los progresos de la civilizacion entre las últimas clases del pueblo en Polonia, Noruega y Rusia, no dudarán de la certeza de esta acumulacion de numerario. Sus efectos no pueden ser sino muy poco conocidos, porque el capital de la Europa entera solo aumenta un 1 por ciento al año.

El estado que hemos dado en este capítulo, de la situacion actual de las minas del Nuevo-Mundo y de las de Méjico en particular, debe hacer temer que la suma de los signos representativos aumente con gran rapidez, á proporcion que los pueblos montañeses de ambas Américas salgan del profundo letargo en que han estado tan largo tiempo. Seria extraviarnos del objeto principal de esta obra, el discutir si los intere

ses de las sociedades padecerán ó no por esta acumulacion de numerario; basta observar aqui que el peligro es menor de lo que aparece á primera vista, porque la cantidad de géneros y mercancías que entran en el comercio, y que deben ser representadas por algo. crece al paso que el número de los signos representativos. Es verdad que el precio del trigo se ha triplicado despues que han refluido en el antiguo continente los tesoros del nuevo. Esta subida, que no se dejó conocer hasta la mitad del siglo xv1°, se verificó de repente entre los años de 1570 y 1595, en los cuales la plata del Potosí, de Porco, Tasco, Zacatecas y Pachuca comenzó á correr por todos los puntos de Europa; pero tambien en el intermedio desde aquella memorable época hasta 1636, produjo el descubrimiento de las minas de América todo su efecto, en cuanto á la reduccion del valor de la plata. En efecto el precio del trigo no ha subido despues hasta nuestros dias, y si algunos autores han dicho lo contrario, es porque han confundido el valor nominal de las monedas con la verdadera proporcion que existe entre el dinero y los géneros.

Cualquiera que sea la opinion que se adopte acerca de los efectos futuros de la acumulacion de los signos representativos, si se consideran los pueblos de la Nueva-España bajo el aspecto de sus relaciones comerciales con la Europa, no podria negarse que, en el estado actual de las cosas, influye poderosamente la abundancia de metales en la prosperidad nacional. Esa

.

abundancia es la que pone á la América en estado de pagar en plata los objetos de la industria extrangera,

y

de participar de los gozes de las naciones mas civilizadas del antiguo continente. A pesar de esta utilidad efectiva, hagamos nuestros votos para que los mejicanos, conociendo sus verdaderos intereses, tengan presente que los únicos capitales cuyo valor crece con el tiempo, son los productos de la agricultura; y que las riquezas nominales son ilusorias, cuando un pueblo no posee las materias primeras que sirven para el mantenimiento del hombre, ó que dan ejercicio á su industria.

Por no cortar el hilo de las discusiones generales que contiene el capítulo xi, y por no mezclar, cuando se trata de materias tan importantes para el estudio de la economía política, lo que pertenece á épocas enteramente diferentes, voy á anotar aqui las noticias que he adquirido acerca de las cantidades de oro que ponen hoy dia en comercio el Brasil y las montañas del Oural, de la relacion entre las materias de oro y plata reducidas á moneda y las empleadas en objetos de joyería, y acerca de las alteraciones que ha experimentado el comercio de la Inglaterra con las grandes Indias y la acumulacion de los metales preciosos en Europa. Me lisongeo, que estas noticias darán alguna luz para la cuestion de saber si la mayor actividad que se nota de algunos años á esta parte en el laborio de las minas de la América, tendrá muy

pronto un influjo notable en el precio de los géneros en nuestros paises.

Del producto de las minas de oro del Brasil, comparado con el de las minas de oro del Oural.

La produccion del oro ha experimentado grandes variaciones de cincuenta años á esta parte: en el Brasil ha disminuido, casi sin que se haya sabido en Europa, con tal rapidez, que es de extrañar que no se hayan visto efectos mas notables en el comercio y en el valor relativo de los metales preciosos. Los descu*brimientos modernos del terreno aurífero del Oural, en el confin de Europa y Asia, prometen la compensacion de las pérdidas que se han hecho en la parte del Ueste: pero estas mudanzas geográficas de los manantiales del oro son casi tan importantes como las variaciones que experimenta su abundancia. La GranBretaña que es la nacion que emplea mas oro en el mundo civilizado, se halla en una posicion mercantil muy diferente respecto del Brasil que respecto de la Rusia. Aunque los metales preciosos se abren camino indudablemente por do quiera que la necesidad los llama, con todo su disposicion local no es la misma en un pais que cuenta ya cincuenta y cuatro millones de.. habitantes, que en una costa americana que por trueques lícitos é ilícitos envia todo su oro inmediatamente á las partes occidentales de la Europa. Yo no entraré aqui en el exámen de estos efectos políticos: bástame examinar los elementos numéricos, cuyo conoci

miento es indispensable á los que quieran llegar á unos resultados ciertos.

Hemos visto mas arriba que á principios del siglo décimonono, poco tiempo antes de las disensiones civiles, la América española producia en oro un año con otro, segun los registros del quinto, y por consiguiente sin contar la masa que absorve el contrabando, 45,300 marcos de Castilla, ó 10,400 kilógramos, de los cuales:

Esto es, un producto seis veces tan grande como el de la Europa y de la Rusia asiática, que antes del año 1817 (año en el que M. de Schlenew empezó el laborio de las arenas auríferas del Oural), no podia calcularse mas que en unos 1600 ó 1780 kilógramos.

El período de mayor riqueza de los lavaderos de oro del Brasil ha sido el corrido desde 1752 hasta 1761; el quinto de oiro en la Capitanía de Minas Geraes, ascendia entonces, un año con otro, á 104 arrobas; y en esta misma época fue cuando se establecieron las cuatro grandes casas de fundiçoes en Villarica, Sabara, S. Joao d'El Rey, y Villa do Príncipe, dos de las cuales han sido suprimidas por haberse reducido en el dia de hoy á un estado deplorable el laborio de las minas de oro del Brasil. Yo recurriré