Copia de carta autógrafa de D." Luis Fajardo para D." Martin de Idiaquez. Del Puerto de Santa Maria á 16 de julio 1596.

Partida de la armada inglesa de Cádiz.

(Archivo general de Simancas.-Estado, legajo núm. 177.)

En las que serán con esta para Su M.a doy cuenta de la partida de la armada inglesa, y de otras cosas en que conviene tomar resolucion con brevedad, que remitiéndome á ellas, solo servirá esta de suplicar á v. m. como he holgado las lea Su M.4, avisándome del recibo; y en lo que por acá viere en que le servir, puede acudir á ello con la voluntad y obligaciones que debo. Guarde Nro. S.or á v. m. con el acrecentamiento que deseo. Del Puerto de S.ta María á 16 de julio 96.-D." Luis Fajardo.

or

Suplico á v. m. me haga mrd. de mandar se dé luego al conde de Chinchon el pliego que va para Su Ex. debajo deste, y al S. D." Juan la que va para Su Ex.*

3.

Copia de carta original de D." Luis Fajardo á Su M.a Del Puerto de S. María á 16 de julio 1596.

Recibida á 21 del.

Los ingleses pegan fuego á Cádiz-Necesidad de nombrar personas aptas para las plazas y oficios de guerra.

(Archivo general de Simancas.-Estado, legajo núm. 177.)

SEÑOR:

Con la mayor diligencia que pude llegué á la ciudad de Jercz á los 10 deste por la mañana, donde hallé al duque de Medina Sidonia, y habiéndole dado la carta de V. M., le pedi me ocupase donde mas ocasiones hobiese, propuniendo la empresa de Cádiz por la puente de Suazo y el deseo que traia de hallarme en ella siguiendo cualquiera bandera, cuando no le paresciese encargarme los que hobieren de ir. Respondióme que no podia ejecutar este parecer por la falta de gente y municiones, que yo despues acá he visto que no es lo que menos cuidado y desengaño debe poner á V. M., que si bien se considera, no es tan grande el daño de haber perdido en seis horas una ciudad y puerto tan famoso con una armada y otra flota, y el estandarte de Jerez con seiscientos caballos, sin que al enemigo le costase el fin desto veinte hombres, habiéndoles empezado á venir menos de quinientos soldados que echó en tierra, como la reputacion que se ha perdido en quel enemigo haya visto que siendo esta provincia del Andalucía la mas fértil y poblada de España, no se hayan podido juntar fuerzas en quince dias que hace hoy que llegó sobre

Cádiz para poderle echar de la ciudad, ni darle en ella un arma, sino que ha gozado los despojos della y de toda la isla y su tierra, con la misma seguridad y deleites que si hobiera estado en el rio de Londres, hasta que últimamente hoy estamos viendo quemar los templos y casas de aquella miserable ciudad, tan de cerca, que nos da el humo en los ojos, con el sentimiento que V. M. puede considerar de no poder acudir al remedio dello.

Pero pues ya lo pasado no le tiene, y este subceso ha descubierto lo que la reputacion perdida sustentaba, de manera que los enemigos pueden estar arrepentidos de no haber pasado á Sevilla, donde aun no están asigurados del miedo que llegó á Córdoba, y otros enemigos podrian despertar, si ya no lo están, á juntarse con ellos, movidos del interés y flaqueza que han visto.

Suplico á V. M. mande mirar en el remedio de todo con la consideracion y prevencion quel caso y necesidad pide, admitiendo este advertimien." con la voluntad y deseo de tan humilde vasallo y criado, y sobre todo en mirar á quien se encargan las plazas y oficios de guerra, que es de adonde ha nacido todo este daño, segun dicen, y se pueden esperar otros mayores, y esto es de manera que los mismos ingleses enemigos lo han reprendido públicamente y se avergüenzan de lo que han visto. Guarde Nro. S.or la católica persona de V. M. como la cristiandad ha menester. Del Puerto de S. María á 14 de jullio 1596.-D." Luis Fajardo.

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Sobre. Al rey nro. señor.-En manos de D." Martin de Idiaquez, de su Consejo y S.o de Stado.

Copia de carta original de D. Luis Fajardo á Su M.a Del Puerto de Santa Maria á 16 de julio 1596.

Recibida á 24 dél.

Salida de Cádiz de la armada inglesa-Número de sus buques, y calidad de sus soldados-Infantería reunida en el Puerto de Santa Maria Necesidad de reparar y fortificar el castillo de la isla de Leon y el puente de Suazo.

(Archivo general de Simancas.-Estado, legajo núm. 177.)

SEÑOR:

A la hora que esta escribo, que serán las seis de la mañana, acaba de salir de la bahía de Cádiz todo el armada inglesa, en que me parece que van número de 140 navíos, poco mas o menos, y entrellos al parecer cosa de 30 navíos grandes, aunque ninguno lo parece tanto ni con mucho como los galeones de V. M. San Matias y San Andrés, que llevan por no haberlos quemado los que estaban en ellos, echándose mucho de ver esta diferencia entre los otros; los demás son medianos, y la mayor parte filibotes y pataches pequeños, y solo he entendido que traigan de consideracion, en que fundan toda su fuerza, un tercio de dos mill ó dos mil y quinientos soldados viejos, que son de los que estaban en las guarniciones de las islas, que vienen á cargo del mariscal, con alguna poca caballería de hombres de armas, y todo lo demás es canalla y gente de mar, con que han hecho la representacion que bastó para turbar y espantar á gente de pueblo y de navíos sin cabeza.

Por entenderse que en los galeones que se quemaron podria haber quedado en la segunda cubierta alguna arti

llería que el fuego no la haya fundido, y otra que se llevaba en el lastre para las naos de Lisboa, vamos D. Francisco Tello y yo, tes.° juez oficial de la Casa de Contratacion á reconocer esto, y ver el cobro que en ello se podrá dar, aunque para continuallo y aprestar algunos navios de los que quedaron en el rio de Sevilla si conviniere, será menester tener órden de V. M., á quien suplico me mande dar la que en todo hobiere de guardar, y si he de acudir á alguna otra parte, porque aquí no queda que hacer mas de lo que digo, y el duque hasta ahora no me ha encargado sino es el venir á este Puerto de S.ta María á reconocer la gente que habia y á remediar algunos desórdenes, donde habiéndolo hecho con la satisfaccion que todos dirán, han llegado despues acá otros dos ó tres gobernadores que me han quitado de cuidado.

La infantería que hallé en esta ciudad á los 15 deste, fueron mil y cuatrocientos y tantos soldados, entrando en este número cerca de setecientos que hay de las compañías del tercio, porque aunque es verdad que hubo alguna mas de la que acudió de las comarcas, toda se iba tan apriesa que á no ponerse las prevenciones y guardas en los caminos no quedára ya nadie.

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Și destas compañías de los lugares fuese menester rehacer los viejos y acrecentar algunos, convendria que V. M. lo mandase con brevedad, y ni mas ni menos el reparo y fortificacion del castillo del Leon y puente de Suazo, que últimamente le tomaron los enemigos por no haberle socorrido y haberle desamparado la poca gente que habia, que es de la consideracion que V. M. sabe por no haber otro paso para entrar en la isla á echar los enemigos que allá quisieren venir á ser vecinos. De las demás cosas que deste subceso hay que dar cuenta á V. M., me remi