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servicio de vuestsa merced Juan Vazquez de Coronado. Al muy magnífico señor Juan Romo, Corregidor de Nicoya por su magestad. Suplico á vuestra merced vaya por la posta al señor doctor la que va con esta á turucaca, iré de aquí á un mes, agora es tiempo.

Muy magnífico señor: escrito é á vuestra merced dos y después de escritas supe que le avian traido á vuestra merced angeo y otras cosas yo tengo necesidad de ciento y cincuenta varas dello, si vuestra merced las tiene será para mi grandísima merced, con las cien telillas que escribí porque la gente me mata sobre la vuelta de turucaca y tengola apercibida y con que vuestra merced nos ayude con este socorro se hará con facilidad la jornada y pagaré yo el angeo al tiempo que vuestra merced mandare y al precio que fuere servtdo para el efeto envio á Domingo Hernández, olgarme ya que si fuese posible se me hiciese la merced porque es el remedio de todo y si vuestra merced se pudiese llegar á esta ciudad no se perdería nada y parecería que traía vuestra merced el socorro para lo dicho vea vuestra merced que tal será la jornada pues la priesa es tanta. Nuestro señor & de Garci-muñoz primero de Mayo; servidor de vuestra merced. Juan Vazquez de Coronado, al muy magnífico señor Juan Romo, Corregidor de Nicoya.

Digo yo Domingo Hennández vecino del Castillo de Garcí-muñoz que e recibido de Juan Romo, Corregidor de la provincia de Nicoya cincuenta va ras de angeo y catorce telillas de á cuatro varas cada una para dar en la ciudad del Castillo de Garcí-muñoz al muy magnífico señor Juan Vazquez de Coronado Capitan General en las provincias de Nicaragua y Costa rica y porque es verdad que lo recibí y lo daré al dicho señor Juan Vazquez lo firmé de mi nombre fecho en Nicoya á siete de Mayo de mill y quinientos y sesenta y tres años testigos Martín Sánchez de Guido é Lope Rodríguez estantes en el dicho pueblo.Domingo Hernández.

Muy magnífico señor Recibi la de vuestra merced de veinte é ocho del pasado y la tierra y yo en lo que se ofreciere haremos lo que vuestra merced mandare; esperanza tengo en Dios que sea de servir su divina magestad y el rey nuestro señor, con Domingo Hernández escribí á vuestra merced sobre ciertas telillas y angeo suplico á vuestra merced que si no se a despachado vuestra merced me la haga se despache porque pende dello la jornada de turucaca y es gran servicio que se hace á su magestad y á mi gran merced, el recrudimiento de los oficiales tengo aquí yo lo daré á vuestra merced si viniere por esta tierra y si no

llevarlo e cuando me vaya. A la señora Beatriz de San Pedro beso las manos por la merced que se me hace encomendarme á nuestro señor ques la mayor que puedo recibir, él guarde la muy magnífica persona de vuestra merced, de Garci-muñoz cinco de Mayo, á servicio de vuestra merced Juan Vazquez de Coronado, al muy magnífico señor Juan Romo, Corregidor de la provincia de Nicoya.

Muy magnifico señor. Recibí el angeo y telillas por el cuidado y merced beso á vuestra merced las manos; las telillas se le pagará á vuestra merced de las que se hicieren en ese pueblo para el tributo, fueron catorce como vuestra merced escribió y las varas de angeo cincuenta, avise vuestra merced del precio para que se pague, vinieron á buen tiempo, espantado estoy mandar el señor doctor desterrar á Zamora si lo hizo porque sustenta con su hacienda esta jornada razon tuvo y si por otro fin ya se acabó y creo avrá dias.

A el mismo y á la real audiencia y al señor Presidente se lo pienso escribir yo me informé de esos yndios y jamás les entendí queja antes por el contrario me dixeron que solo él los favorecía y pues yo pasé por ese pueblo y le dexé justo fuera creyera el señor doctor que convenia ansi entiendo que lo entenderá como pasa por mi carta y se desengañará de lo pasado, á la señora Beatriz de San Pedro beso las manos, nuestro señor & de Garcí-muñoz á diez y ocho de Mayo de mill y quinientos y sesenta y tres años. Antier estuvieron en esta ciudad doce caciques y doscientos yndios, servidor de vuestro merced, Juan Vazquez de Coronado, al muy magnífico señor Juan Romo, Corregidor de Nicoya.

Muy magnífico señor. Todas las provincias y caciques vistas hasta ahora sirven y con ellas sus caciques y entre ellas el que mejor sirve es Garavito de cuya causa ay necesidad de mays hasta la cosecha que todos harán milpas, la merced del mays pasado fué muy grande, á vuestra merced suplico quel mays que se coje en esos pueblos comarcanos se tome todo para esta jornada para que se traiga á los chomes cincuenta é cinco hanegas y esta valga si es necesario para el descargo de vuestra merced por jución porque el Rey tiene de paz más de veinte mill hombres en la mejor tierra de yndias, y vuestra merced luego questa llegue la venga á ver para que se comience acrecentar en méritos y haga traer el mays que digo á los chomes y si no lo oviere de los encomenderos traigase de la troja aunque yo más querría que se guardase entienda vuestra merced ques tiempo que hacer servicio á su Magestad en recoger mays es el mayor que puede recibir aunque allá se

padesca necesidad no se si será vuestra merced llegado y por esto envio comisión á Blazquez para ello e lleva en ausencia de vuestra merced y no de otra manera, yo me parto á Torucaca y seré de buelta de aquí á un mes, ase hecho hasta oy gran servicio á Dios nuestro señor y á su Magestad y muy mayor que se puede imaginar ni desear a sido el bien, á la señora Beatriz de San Pedro beso las manos, nuestro señor de Nuevo Cartago veinte de Enero de mill y quinientos y sesenta y tres á servicio de vuestra merced.-Juan Vazquez de Coronado. Al muy magnífico señor Juan Romo, Corregidor de Nicoya por su Magestad.

Muy magnífico señor. Mas gracia e allado en vuestra merced que en ninguno de los que atrás, beso á vuestra merced las manos por todo especial por el favor que se dá á esta jornada y el mays que vino la sustentó hasta agora vuestra merced nos envie lo que queda en el primer barco y cincuenta hanegas á los chomes luego la tierra lo pagará ques buena y quedan de paz mas de diez y seis mill yndios, boy á torucaca con ochenta soldados y docientos amigos, tengo gran conserva de requiza a sido Dios servido de favorecerme hasta agora y creo lo hará adelante, á la señora Beatriz de San Pedro beso las manos y suplico se acuerde de nosotros en sus oraciones que yo le prometo cual en mi servidor y amigo que no se descuidara, escribo de camino dos jornodas de la ciudad y sin aderezo, en llegando el barco le envie vuestra merced con el mays que huviere. nuestro señor & de Aczerrí veinte é ocho de Enerode mill y quinientos y sesenta y tres, los que van con esta suplico á vuestra merced despache á Espinosa, servidor de vuestra merced. Juan Vázquez de Coronado. al muy magnífico señor Juan Romo, Corregidor de Nicoya.

Muy magnífico señor. Nuestra jornada se encamina en bien sea Dios loado el maese de campo Juan de Ovalle va por mi teniente á Costa rica es mensajero desta si fuere necesario dar al barco que irá breve doscientos hanegas de mays, suplico á vuestra merced se le den que de lo nuevo se le pagará. á vuestra merced den dinero como vestra merced más mandare yo me partiré siendo Dios servido en fin deste mes porque hace buen tiempo y no quería perderlo meteré en el castillo á cumplimiento de ciento y cincuenta soldados sin los que vernan de Guatemala que estan de camino, mi hermano Gaspar Arias y los Cuetos y Barrera y otros veinte soldados, á la señora Beatriz de San Pedro beso muchas veces las manos. nuestro señor & de León á diez y seis de Julio de mill y

quinientos y sesenta y dos años, servidor de vuestra merced, Juan Vazquez de Coronado. Al muy magnífico señor Juan Romo, Corregidor por su Magestad en Nicoya.

Muy magnífico señor. Mi viage se hizo prósperamente, que en un palenque me hirieron de cuarenta soldados los veinte y dos socorrilos con gran priesa..

.falta en la jornada con que fueron las mayores heridas que se an visto en las yndias, dexo tres palenques de paz que tienen mas de cuatro mill yndios y mas oro que tierra ay en la comarca de turucaca que quedan de paz y en la de conto quepo más de sesenta mill hombres y muy hombres, ay necesidad de gente: allé un especia que se llama chuob ques clavo y pimienta, el clavo de la mar del norte no lo..... de descuidarse los yndios con muy ....solamente sepa

.que no se sufre por....

vuestra merced ques poco lo que se a dicho de la grandeza de esta tierra respecto de lo que ella es. de alpargates tendré necesidad vuestra merced mande que se me recojan los que fuere posible. á la señora Beatriz de San Pedro beso las manos. nuestro señor & de Garci-muñoz á veinte y cuatro de Abril, servidor de vuestra merced. Juan Vazquez de Coronado. Suplico á vuestra merced se me envien á los chomes treinta hanegas de mays para cuatro ó cinco camaradas que se mueren de hambre é si no lo huviere busquese y si llegare aí un barco de realejo vuestra merced le mande eche cincuenta hanegas que yo las pagaré de las del barco. Al muy magnífico señor Juan Romo corregidor de Nicoya.

Muy magnífico señor. Para que se efectue la jornada de turucaca que vuelve la gente á poblar tengo necesidad de sesenta ó setenta telillas no se si las hay hechas del tributo. á Samora escrivo sobre que por la posta me las envie. si no estuvieren hechas, vuestra merced me las envie las que, tuviere suyas y pagarse á dellas del tributo y si no yo las pagaré á vuestra merced en dinero. los alpargates que faltan tambien son necesarics mande vuestra merced que se nos traigan, a de ser todo aquí de hoy en doce días, el negocio es mas importante que e tenido, vuestra merced me la haga que aya todo recado y prisa, por los negocios de Fajardo no puede ser mas largo. á la señora Beatriz de San Pedro beso las manos. Nuestro señor & de Garcí-muñoz

á treinta de Abril de mill y quinientos y sesenta y tres años. á servicio de vuestra merced Juan Vazquez de Coronado. al muy magnífico señor Juan Romo, Corregidor de Nicoya.

E ansi presentada la dicha provisión real é interrogatorio de que en ella se hace mensión y cartas mesivas por

el dicho Juan Romo, el dicho Juan Vazquez de Coronado Alcalde Mayor la tomó en sus manos y la besó y puso sobre su cabeza con el acatamiento y reverencia que devia y era obligado y dixo la obedecia y ovedeció como carta de su rey y señor natural y en cuanto al cumplimiento della dixo que estaba presto de hacer y cumplir lo que por su Magestad en ella le manda y quel dicho Juan Romo presente los testigos de que se entiende aprovechar y presentados hará justicia, testigos Miguel Sánchez de Guido y Francisco de Aguilar y Hernando Barrientos estantes en este dicho pueblo y lo firmó de su nombre, Juan Vasques de Coronado, pasó ante mi Pedro Gallegos.

E después de lo susodicho este dicho día é mes é año susodicho ante el dicho señor Alcalde mayor y en presencia de mi el dicho escribano pareció presente el dicho Juan Romo, Corregidor é proveedor general de las dichas provincias del nuevo Cartago y Costa rica, dixo que para información de lo contenido en la dicha provisión real presento por testigo á Diego Caro de Mesa Alguacil mayor y procurador general de las dichas provincias é Francisco de Gallegos de Villavicencio, Alferez general en ella é Juan Alonso y Pero Díaz de Loria y Francisco Lobo y Pedro Gallegos vecino y regidor de la ciudad de Cartago y Costa rica y todos vecinos de la dicha ciudad que presentes estaban de los cuales y de cada uno dellos el dicho señor Alcalde Mayor tomó y recibió juramento sobre una señal de cruz por Dios y por Santa María y por las palabras de los santos cuatro evangelios, donde quiera que mas largamente estan escritos los cuales y cada uno dellos hicieron bien y cumplidamente so cargo del cual prometieron de decir verdad, testigos los dichos. Pasó ante mi Pedro Gallegos.

El dicho Francisco Gallegos de Villavicencio aviendo jurado y siendo preguntado por el tenor de las preguntas del dicho interrogatorio dixo y depuso lo siguiente.

A la primera pregunta dixo que conoce al dicho Juan Romo de tres años á esta parte porque en la villa de la Trinidad le vido y así mismo en la ciudad de Granada de las provincias de Nicaragua donde este testigo supo que venía proveido por Corregidor de la provincia de Nicoya y de seis meses á esta parte venido este testigo á este pueblo de Nicoya le a visto usar el oficio é cargo de Corregidor y que es de edad de treinta é ocho años é que no le tocan las generales.

A la segunda pregunta dixo que sabe que su Magestad hizo merced y el Governador en su nombre de nombrarle

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