doles paz ninguna; é todo esto ha hecho sin llamallos á que viniesen de paz ni hacelles los requerimientos que Su Majestad manda, antes si algunos venían de paz los dejaba tales como á los mismos que hallaba de guerra, é por esta cabsa é por otras muchas no le salía indio de paz. E llegado á Cochacajas, que es veinte leguas del Cuzco, dejando destruída la tierra como la dejaba, supo por nueva de un español que venía del Cuzco, como el adelantado don Diego de Almagro, gobernador por Su Majestad del Nuevo Toledo, había venido de las provincias de Chile é había entrado en el Cuzco é había preso á Hernando Pizarro porque decían que le había defendido la entrada; é sabido lo susodicho, el dicho capitán Alonso de Alvarado se puso en armas é mandó cortar picas é alzar banderas é hacer capitanes é sargentos é hacer corredores del campo; é decía públicamente que le había de dar batalla al gobernador don Diego de Almagro, como en efeto lo hizo, é luego don Diego de Almagro envió á Diego de Alvarado, é á Diego de Mercado, é á Gómez de Alvarado, é á un Sosa, secretario del dicho don Diego é escribano del rey, con las provisiones de Su Majestad, á requerir al dicho don Alonso de Alvarado que las obedeciese las dichas provisiones ó se saliese de los términos del Cuzco donde estaba é se fuese donde estaba el gobernador don Francisco Pizarro; é que venidos los dichos mensajeros, este testigo vido que los rescibió, é queriéndole notificar las provisiones, arremetió á ellos é los prendió, é les dijo que no oía nada é hizo que se tapasen las orejas muchos é que echasen á huir diciendo: <<No oimos nada»; é luego comenzó á hacer sus alardes, á hacer sus escuadrones, porque tenía quinientos españoles de pie é de caballo, é supo que don Diego de Almagro no traía tanta gente; é como él se hallaba poderoso, comenzó á repartir su gente por un río que está abajo é á defender un puente que está en el camino real, é á hacer algaradas é poner tiros de artillería é juntar la gente é hacelles parlamentos que todos toviesen buenos ánimos para dar la batalla al dicho gobernador, porque pensaba prendelle; é sabido todo esto por el dicho don Diego de Almagro, como le había preso los mensajeros, é no quería obedescer las provisiones de Su Majestad ni oíllas, envió un alcalde á hablalle, é á la pasada de la dicha puente hizo el dicho Alonso de Alvarado que arre metiesen con el dicho alcalde é le quebrasen la vara, é de que esto vido el dicho alcalde, é que estaban en armas, se tomó la vara hecha pedazos con el un pedazo de ella y el otro pedazo cayó en el río; é viendo el

dicho gobernador don Diego de Almagro que por bien ni mal no se podía averiguar con el dicho Alonso de Alvarado, vino de la otra parte de la puente con toda su gente é dió una noche en el real del dicho Alonso de Alvarado é lo prendió é lo llevó preso al Cuzco é tomó la gente del dicho Alonso de Alvarado. E ansí dejólo preso con Gonzalo Pizarro, que estaba preso en el Cuzco, é se partió á la ciudad de los Reyes, para hacer concierto con el dicho gobernador don Francisco Pizarro, é como el dicho Alonso de Alvarado vido salido del Cuzco al dicho gobernador don Diego de Almagro, el dicho Alonso de Alvarado se soltó de la prisión en que estaba, que le soltaron ciertos amigos suyos, é soltaron á Gonzalo Pizarro, que estaba también preso, é en casa del teniente de gobernador que estaba en la dicha ciudad del Cuzco, ...é andando casas

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en casas tomando armas é caballos é otras muchas cosas, é llevando é apellidando gente que se fuesen con ellos, é salieron de la ciudad del Cuzco después de tomados los caballos é armas que hallaron, por donde la ciudad del Cuzco quedó en tanto peligro, que si el Inga diera sobre ellos, que entonces andaba alzado, la tomara é se perdiera el reino por quedar sin caballos; é se fueron á la ciudad de Lima, donde estaba el Marqués don Francisco Pizarro, é hallaron que andaban en concierto el Marqués don Francisco Pizarro é don Diego de Almagro para se conformarse é servir á Su Majestad; é el dicho Alonso de Alvarado con el dicho Gonzalo Pizarro é los demás alborotaron la cosa, diciendo que quería el dicho Alonso de Alvarado complir su honra, pues que el Marqués don Francisco Pizarro tenía número de gente, é en estos comedios solTaron á Hernando Pizarro que don Diego de Almagro traía consigo; é lechos los conciertos entre los gobernadores é viendo Alonso de Alvarado que estaba ya suelto, hizo á Hernando Pizarro que quebrantase las amistades que tenía puestas é que fuese á dar la batalla á don Diego de Almagro, para lo cual fué por capitán el dicho Alonso de Alvarado; y en efeto se dió la batalla en las Salinas, junto al Cuzco, donde murió nucha cantidad de españoles é caballos é se robaron, por donde vino el perdimiento á estos reinos de Su Majestad, é ha venido ansí á los españoles como á los indios é naturales de la tierra; é este testigo oyó decir á muchas personas é á Pedro de Samaniego que Alonso de Alvarado le había dicho al dicho Samaniego é á otros no sabe cuántos, que fuesen á natar á Pedro de Lerma, é que en su casa le hallaron echado sobre la

cama, pues le había enjuriado; y en efeto fué el dicho Samaniego é otros con él é le mataron é dieron de estocadas; y este testigo sabe que, yendo Hernando Pizarro con mucho número de gente, por capitán general el dicho Alonso de Alvarado, le envió á desafiar por confiarse que él era capitán é llevaba cien hombres amigos suyos; é si no fuera por Gonzalo Pizarro, que lo remedió é hizo que no hobiese efeto, este testigo cree que hobiera gran matanza de españoles, porque este testigo conosce al dicho Alonso de Alvarado ser hombre banderizo é siempre traer bandos, porque también este testigo le vido tener ciertas pasiones é bandos con Francisco de Chávez, é echó mano á la espada delante del Marqués don Francisco Pizarro; é este testigo vido que llevaba mucha gente armada con corazas é cotas, é el dicho Marqués don Francisco Pizarro como era bueno é conoscía que el dicho Alonso de Alvarado tenía amigos, lo apaciguó é pasó por ello. E salido de esta revuelta, salió una noche á desafiar á un Gómez de Alvarado, también por ciertas pasiones; é que por todo esto pasó el Marqués den Francisco Pizarro, como hombre que le temía porque otras veces no había querido obedescer sus mandamientos, antes como hombre poderoso, y estando en la ciudad de los Chachapoyas, quitaba indios estando dados é encomendados por el Marqués don Francisco Pizarro, como hombre que no temía ni obedecía á los dichos mandamientos é cédulas del dicho Marqués don Francisco Pizarro; antes trayendo alborotos é pasiones con Gómez de Alvarado é con otras personas, é quitó los indios á los amigos del dicho Gómez de Alvarado, que eran un Santiago Camacho, vecino de la dicha cibdad, é otras personas, é veniendo los dichos á quejarse al dicho Marqués, el Marqués les dió mandamientos para que se los tornasen, pues los tenían encomendados por sus cédulas, y el dicho Alonso de Alvarado no los quiso obedecer por las razones que este testigo tiene dichas, é porque el Marqués don Francisco Pizarro no le osaba ir á la mano, antes por maña le mandó que fuese á una entrada é le envió un mandamiento para que luego fuese, é tras esto envió un teniente de gobernador á la ciudad de la Frontera, á un Alvaro de Ordaz(?); y el dicho Alonso de Alvarado, cuando llegó el dicho Ordaz, estaba fuera del dicho pueblo, é lo supo en el camino; é sabido, envió ... á decir á los del cabildo, que eran todos sus parientes é paniaguados que los había él metido en el cabildo, que no le rescibieran, é que si algún regidor hobie se que lo recibiese, al que le recibiese, que le quebrasen la vara en la ca

beza; y en efeto no lo recibieron al dicho Ordaz; é que este testigo sabe é vido que estando en Jauja el señor gobernador Licenciado Vaca de Castro con el ejército de Su Majestad, que lo tenía junto para atraer al servicio de Su Majestad á don Diego é á sus secuaces, é viendo que estaba la tierra alzada é rebelada contra el servicio de Su Majestad, que la tenía don Diego é sus secaces, estando Per Alvarez Holguín por capitán é maestre de campo del ejército de Su Majestad, el dicho Alonso de Alvarado, como hombre revoltoso é no teniendo respeto al peligro en que estaba la tierra, ni á que estaba la persona del dicho señor gobernador, ni á los cargos que el dicho Per Alvarez tenía, se revolvió contra él é estaban para salir á desafío una noche con mucha gente armada de un cabo é de otros, é sabido por el dicho señor gobernador, salió aquella noche é los prendió é apaciguó, los rescató con su buena disposición é valentía; é este testigo cree que si el dicho señor gobernador allí no se hallara, que se perdieran estos reinos por la mortandad de españoles que aquella noche hobiera, por ser el dicho Per Alvarez capitán é tener á su cargo toda la más gente que había, é el dicho Alonso de Alvarado ser ansimesmo capitán; é después que se dió la batalla, este testigo ha visto que el dicho Alonso de Alvarado ha tenido con el señor gobernador muchos desacatos é soberbias, porque después desafió á Diego de Carvajal, é otras muchas desvergüenzas, é que el señor gobernador no ha entendido en ello, porque ha habido tantas cosas en que entender é de tantas calidades que tocan al servicio de Su Majestad é en apaciguar la tierra é asentalla, que ha sido menester sobreseello; é cuando quiso remediallo, el dicho Alonso de Alvarado se fué huyendo á España; é que este testigo sabe que el dicho Alonso de Alvarado vino á esta provincia de Guánuco á apacigualla con ciertos españoles que traía en su compañía; é llegado que fué á la provincia que se llama Guari, mandó llamar de paz á ciertos caciques é prencipales de la dicha provincia, é luego vinieron de paz mucha cantidad de indios é prencipales; é desque los tuvo de paz, en la plaza de la dicha provincia de Guari quemó cantidad de veinte caciques é prencipales, no guardándoles ninguna paz, é les robaron sus haciendas é ovejas á la dicha provincia é caciques; é que para el juramento que tiene hecho le paresce á este testigo que si el dicho Alonso de Alvarado á estos reinos volviera, con cargo é sin cargo, que sería muy gran alboroto para la tierra é se perdería, porque lo tiene por hombre apasionado é parcial é no tiene respeto á mandamientos de sus gobernadores ni á sus

gobernadores, é porque este testigo vee que hoy día en este pueblo é en otros de estos reinos hay alborotados por su cabsa, pensando que ha de venir.

Preguntado si sabe qué ha hecho el capitán Mercadillo en esta provincia, dijo que este testigo ha oído decir é es público é notorio que el dicho Alonso Mercadillo estuvo en la provincia de los Chupachos nueve meses, poco más ó menos, é que en las comarcas é la dicha provincia fué robada de él é de sus soldados, é llevados é muertos mu

chos indios naturales, é quemó caciques, é que hoy día se quejan los naturales del dicho Mercadillo é de algunos que estaban con él, lo cual hizo sin les hacer los requerimientos que Su Majestad manda, é que esto es público é notorio en esta provincia, porque á este testigo se le han quejado indios de lo susodicho, etc.

Preguntado si sabe que el dicho Gómez de Alvarado, siendo capitán en esta provincia, é los daños que él é sus soldados é los que estaban con él hizo, dijo que no sabe que el dicho Gómez de Alvarado hiciese daño en la dicha provincia ni ha oído quejarse de él á españoles ni á indios, etc.

Preguntado si sabe que Pedro Barroso, estando por capitán en estas provincias, él ó los que estaban con él si hicieron daños en la dicha provincia ó robos ó otras cosas ó alguna cosa fuera de las contenidas en la comisión é mandamiento del señor gobernador, dijo este testigo no sabe que el dicho Pedro Barroso ni ningún español que con él estoviese haya hecho ningún daño en la tierra, antes era buen capitán é buen juez, etc.

Preguntado si sabe que algún otro capitán ó otra persona haya hecho en estas provincias daños á los naturales é robos é muertes, dijo que lo que sabe de esto es público é notorio que un Gonzalo de Trujillo, vecino de la ciudad de la Frontera, vino á la provincia de los Chupachos con cuatro españoles, que el uno es Pedro Roquera(?), é el otro Cornejo, é los otros no se acuerda, siendo con ellos mucha cantidad de indios de la provincia de los Conchucos é otras partes, sin poder ni facultad del gobernador ni teniente ni persona que dárselo pudiese al dicho Trujillo, é robó en la dicha provincia de los Chupachos é otras provincias, é en el Tambo Real de la dicha provincia de los Chupachos mató el dicho Trujillo é los que con él vinieron é los indios que con él venían, sus amigos, cantidad de más de cuatrocientos indios, entre los cuales mataron el cacique principal de los Chupachos, é le llevaron atados mu