Historia de las Indias de Nueva-España y islas de tierra firmeImprenta de J.M. Andrade y F. Escalante, 1867 - 2 páginas |
Otras ediciones - Ver todas
Historia de las Indias de Nueva-España y islas de Tierra Firme, Volumen1 Diego Durán Vista completa - 1807 |
Historia de las Indias de Nueva-España y islas de Tierra Firme, Volumen1 Diego Durán Vista de fragmentos - 1951 |
Términos y frases comunes
Acauada adereçados agora andauan aperceuir aposento armas aueis auia auian auiso Axayacatl Azcaputzalco baxo braço cacao CAPITULO caualleros caueça cerimonias Chalco Cholula ciudad de México ciudades contento coraçon Cuitlauac Culhuacan Cuyuacan dándoles dauan delante dellos demas dexó dice dieron dixo embaxada emos empeçaron envió eran esclauos estaua exército fiesta fuerça fueron fuesen galanas gente goçar grandeça grandes guerra hicieron hiço hijos honra Itzcoatl joias llamauan llegaron lleuaron luego mandó llamar manos mantas matlatzincas mensajeros mesmo mexicanos moços muerte mugeres muncho mundo nacion nenguno osequias piedras plática plumas podia presos principales prouincias qual quales quatro quenta queria raçon real reciuió Rey Auitzotl rey de México rey de Tezcuco rey Montecuma reyno riqueças rodelas sacrificio salian salieron sauer solenidad Tacuba tambien templo tenian tepanecas Tepeaca tezcucanos tierra Tlacaelel Tlatelulco Tlaxcala tlaxcaltecas traian trauajo tributo uviese valerosos Véase la lámina venian venidos Vexotzinco viejos viendo vinieron vitoria Vitzilopochtli voluieron Xuchimilco ystoria
Pasajes populares
Página 268 - Tzinapécuaro, donde al tercer dia se juntaron todos los soldados y gente de guerra con toda la priesa posible y mandaron asentar el real, el qual asentaron con muchas tiendas y casas de esteras, quellos usauan en sus guerras y oy en dia las usan en los mercados, que son unos tendejones ( 1 ) de juncos que echan las espadañas.
Página 34 - Cuauhtloquetzqui dijo a todos los de la compañía: "hijos míos, razón será que seamos agradecidos a nuestro Dios y que le agradezcamos el bien que nos hace; vamos todos y hagamos en aquel lugar del tunal una ermita pequeña donde descanse agora nuestro dios: ya que no sea de piedra, sea de céspedes y tapias, pues de presente no se puede hacer otra cosa".
Página 267 - ... y asi partidos á sus tierras y prouincias mandaron apregonar la guerra, para la qual se juntó mucha cantidad de soldados de todas las naciones, y inviados á México con todo lo necesario de armas y bastimentos, y toda gente muy lucida de soldados viejos y...
Página 35 - Azcaputzalco y de los de Texcuco, porque allí llegaban los términos del uno y del otro pueblo, y por la otra parte del Mediodía, términos de...
Página 35 - Azcaputzalco y á los Tepanecas, que son los de Cuyuacan y Tacuba, y que se les ofreciesen y diesen por amigos y se les subjetasen con intento de pedilles piedra y madera para el edificio de su ciudad...
Página 17 - Los Tultecas, finalmente, escribe, tambien se llaman Chichimecas y los Otomies y Michóacas, ni mas ni menos;. ...» Veamos otras opiniones: Durán (27) relata: «Es de saberse que los mexicanos, los que agora son Tarascos y avitan la provincia de Mechoacan, y los de la provincia de Malinalco, todos eran de una congregacion ó parcialidad y parientes y salieron de aquella sétima cueva debajo del amparo de un dios que los guiaba y todos...
Página 271 - Matlatzinco vino ante el rey, mostrando pesar del mal suceso del dia pasado, le hiço una plática consolatoria y alcauo le ofreció mil cargas de flechas y de rodelas y espadas y hondas y otros g-éneros de armas que ellos usauan, ofreciéndole gente de guerra si la uviese menester.
Página 272 - ... es la Cuauhtlalpan , no auian escapado sino trescientos, poco mas, y de toda la tierra caliente, muy pocos; de suerte que se halló que auian muerto en la guerra veinte mil hombres, antes mas que menos. Hecha la cuenta y visto el número de los que faltauan, enviaron luego sus mensajes á Tlacaelel para que supiese las tristes y desgraciadas nuevas y el mal suceso de la guerra.
Página 18 - Por tanto, que para librarlos de esta aflicción, por el grande amor que les tenía mandaba que aquella noche al primer sueño, estando ella durmiendo, con todos sus ayos y señores la dejasen allí y se fuesen secretamente sin quedar quien le...
Página 205 - Poderoso Señor: lo que yo, tu indigno siervo, sé de lo que me preguntas, es que nuestros padres moraron en aquel felice y dichoso lugar que llamaron Aztlan, que quiere decir blancura; en este lugar ay un gran cerro, en medio del agua, que llamauan Culhuacan, porque tiene la punta algo retuerta hacia abaxo, y a esta causa se llama Culhuacan, que quiere decir "cerro tuerto".