Imágenes de páginas
PDF
EPUB
[merged small][merged small][merged small][merged small][ocr errors][merged small][merged small][merged small][merged small][merged small][merged small][ocr errors][merged small][merged small][merged small][ocr errors][merged small][merged small][merged small][ocr errors][merged small][merged small][merged small][merged small]

Se cree que ha habido una omision en los libros de la tesorería, que asciende á 54,400 marcos; de manera que el monedage total desde 1773 hasta 1790 ha ascendido á 8,219,384 marcos de plata, ó á 1891 marcos de oro y á 456,632 marcos de plata, un año con otro durante este intervalo. Solo el año 1791 dado en oro 257,526 pesos, y en plata 4,365,175

pesos.

ha

El contenido de los minerales del Potosí ha disminuido á proporcion que las labores han ido siendo mas profundas. En esta parte, como en otras varias, el cerro del Potosí presenta grandes puntos de analogía con las minas de Gualgayoc. A la superficie del terreno, en sus crestones, las vetas de la Rica, de Centeno y de Mendieta que atraviesan la pizarra primitiva, estaban llenas en todo su ancho de una composicion de plata sulfúrea, de rosiclér y de plata

nativa. Estas masas metálicas sobresalian en forma de crestones, despues que las rocas de los respaldos fueron destruidas, sea por la accion de las aguas, sea por alguna otra causa que mudó la superficie del globo.

* En el año 1753 el producto de la plata del Potosí era de 2,518,198 pesos.

[ocr errors]

Por la inversa la veta del estaño sulfúreo, y los minerales de plata córnea no empiezan á dejarse ver sino á grande profundidad. Esta composicion de dos formaciones en una misma veta, se verifica tambien en el antiguo continente, por ejemplo, en muchas minas de Freiberg, en Sajonia **. En 1545, los minerales que contenian de 80 á go marcos por quintal eran bastante comunes; aunque no debamos dar por cierto con Ulloa, que el volúmen entero de los minerales extraidos de la mina llegase á este grado de riqueza. Acosta dice positivamente que, en 1574, el contenido medio era de 8 á 9 marcos por quintal. Se ve tambien por la relacion de don Francisco Tejada acerca de las minas de Guadalcanal, en España, que, en 1607, la riqueza media de los minerales del Potosí no era sino de onza y media. Desde principios del siglo XVIII° no se cuentan sino tres ó cuatro marcos por cajon de - 5000 libras de peso, ó* á por quintal. Los mi

ό

48

100

64

100

nerales de Potosí son por consiguiente sumamente pobres, y solo á causa de su abundancia es como se sostiene su laborío en estado floreciente. Debe extrañarse el ver que, desde el año de 1574 hasta el de 1789, ha disminuido la riqueza media de los minerales en razon de 170 á 1; al paso que la cantidad de plata extraida de las minas de Potosí no ha disminuido sino como 4 á 1.

Desde 1545 á 1571, solo se trabajaron los minerales

* Barba, lib. 1, cap. xxx11, p. 56. ** Werner, Gangtheorie, pág. 248.

de Potosí por medio de la fundicion. Como los conquistadores no tenian otros conocimientos sino los militares, no sabian dirigir las labores metalúrgicas. No consiguieron fundir el mineral con fuelles, y adoptaron el raro método que los indígenas usaban en las minas vecinas de Porco, que habian sido beneficiadas en utilidad del Inca, mucho tiempo antes de la conquista. Colocaron en las montañas que rodean la ciudad de Potosí, en los parages donde soplaba el viento impetuosamente, hornos portátiles llamados huaires ó guayras en la lengua quichua. Estos hornos eran unos cañones cilíndricos de arcilla, muy anchos, y con gran número de agujeros. Los indios echaban en ellos, alternando las capas, mineral de plata, galena y carbon, la corriente de aire que penetraba por los agujeros en lo interior del huaire, avivaba la llama dándola una grande intensidad. Cuando veian que el viento soplaba demasiado fuerte, y que se consumia demasiado combustible, llevaban los hornos á otro parage mas bajo. Los primeros viageros que visitaron las cordilleras hablan todos con entusiasmo de la impresion que les habia dejado la vista de mas de 6000 fuegos que alumbraban la cima de las montañas alrededor de la ciudad de Potosí. Los indios sacaban la galena necesaria para su fundicion de una montañuela inmediata al cerro de Hatun Potocsí, y que se llamaba el infante, ó Huayna-Potocsí*. Los ma

y

*

Propiamente la montaña Padre y la montaña Hijo. Las diferentes

tes,
ó metales sin purificar, que salian de los huayres
colocados en las montañas, se volvian á fundir en las

chozas de los indios, valiéndose del antiguo método
de hacer soplar el fuego por diez ó doce personas á un
tiempo, al través de unos tubos de cobre de uno ó
dos metros de largo con un agujero muy pequeño al
extremo inferior. Fácil es concebir que enorme can-
tidad de plata debia quedar en las escorias, sin combi-
narse con el plomo.

Pedro Fernandez de Velasco, que, como lo dice cla-
ramente el jesuita Acosta*, habia visto en Méjico co-
mo se sacaba la plata de la mina por medio del azo-
gue, propuso al virey del Perú don Francisco de To-
ledo el introducir en el Potosí la amalgamacion. Salió
bien de sus ensayos, desde el año de 1571, y de los
ocho á diez mil quintales de azogue que producia la mina
de Huancavelica á fines del siglo xvi°, mas de seis ó
siete mil se consumieron en las labores del Perú. Se
trabajaron con utilidad los minerales que en los pri-
meros años se habian tenido por demasiado pobres
para fundirlos en los huayres.

La abundancia de sal gema, que se beneficia en la

cimas del volcan de Pichincha tienen nombres análogos; y como
los académicos franceses no han distinguido en sus obras el viejo
Rucu-Pichincha del niño ó Guagua-Pichincha, por eso es tan difícil
volver á encontrar el parage de la estacion académica de Bouguer,
La Condamina y Ulloa. (Véase mi Recueil d'Observations astrono-
miques, vol. 1).

Acosta, p. 146.

mesa de las Cordilleras, cerca de Curahuara, de Carangas y de Yocalla, facilita mucho en el Potosí la amalgamacion. Segun calcula Alonso Barba*, se consumió, desde 1545 á 1637, la enorme cantidad de 234,700 quintales de azogue. Desde el año de 1759 al de 1763, fue el consumo de 1600 á 1700 quintales ** por año. Hácia fines del siglo xv1o, se forzaba á 15,000 indios á trabajar en las minas y haciendas de beneficio de Potosí; y se llevaban diariamente á la ciudad mas de 1500 quintales de sal de Yocalla; pero hoy no se cuentan arriba de 2000 mineros, á quienes se paga á razon de medio duro al dia. Quince mil llamas y otros tantos borricos se ocupan en llevar el mineral desde la montaña de Hatun-Potocsí á las haciendas de amalgamacion. En el año de 1790, se acuñaron en la casa de la moneda de Potosí, 4,222,000 pesos, á saber, los 299,246 ó sean 2204 marcos, en oro, y los 3,926,173 pesos, ó sean 462,609 marcos, en plata.

Reflexionando sobre la historia de los metales preciosos, y el interes que toman en ella cuantos se dedican á investigaciones de economía política, no se hará extraño que hayamos expuesto con prolijidad los hechos que pueden dar alguna idea de la cantidad de plata que se ha extraido en el espacio de dos siglos medio de las minas del Potosí. Ha sido menester comparar los testimonios de los primeros autores es

y

[blocks in formation]
« AnteriorContinuar »