nian todavía en gran parte de los diputados de las extraordinarias, que asistian como suplentes de sus provincias por no haber concurrido los propietarios, se siguió en todo y por todo el mismo sistemą, que no siendo á propósito para reunir y sosegar los ánimos de los españoles, vestir y abastecer bien nuestros exércitos, tenia á los mas en el mayor descontento por conocer que se perdia la mejor ocasion de dar la ley á los franceses, y de internar nuestros exércitos en su territorio para mantenerlos siquiera á su costa.

di

Con estos antecedentes entraron los meses de noviembre y ciembre sumamente placenteros por las operaciones militares que se fueron comunicando. Á fines de octubre corrieron voces y cartas

que suponian haberse rendido Pamplona. Pero el Redactor de la gaceta no tuvo reparo en decir en la del 4 de noviembre que aunque estaba muy estrechada, todavía no se habia verificado su rendicion. Esto entibió alguna cosa los ánimos de los madrileños, y singularmente de los genios sospechosos y desconfiados. Mas duró poco esta desconfianza, porque al dia 5 inmediato se supo habia venido de oficio la rendicion de tan importante plaza. Hubo un repique general de campanas y una alegría increible, que se aumentó al dia siguiente, en cuya gaceta se estampó el siguiente párrafo:..

"Con fecha 1.° del corriente desde Pamplona dice el general don Cárlos España al señor gefe políti co de esta provincia lo que sigue:

"Excmo. Sr.: tengo la satis faccion de informar á V. E. que ésta tarde á las cinco las tropas nacionales, que baxo mi mando formaban el bloqueo de esta plaza de Pamplona, han entrado en élla de resultas de la capitulacion ratificada por mí en virtud de la autorizacion del excelentísimo señor general en gefe de los exércitos nacionales: la guarnicion ha quedado prisionera de guerra, y acaba de desfilar delante de 89 hombres de tropas nacionales, y ha seguido su marcha para ser conducida á Pasages en número de 3500 hombres de bella infantería. Este importante suceso aca ba de consagrar los triunfos del Excmo. Sr. duque de Ciudad-Ro drigo en la empresa de los sucesos de España. La plaza y ciuda

dela han quedado intactas: el ve cindario ha sufrido algunas hambres durante el bloquéo. Tengo el honor de felicitar á V. E. por este importante suceso. Dios guar de á V. E. muchos años. Pamplona 1.o de noviembre de 1813. Excmo. Sr. Cárlos de España. Excmo. Sr. gefe político superior de la provincia de Madrid."

Esta noticia fue de las mas lisonjeras y plausibles, al ver recobrada tan importante plaza, y sin los horrores y desgracias de la de S. Sebastian. Pues antes se habia dicho si los franceses cometerian el horrible atentado de minar ý destruir las mejores fortificaciones de la plaza y castillo, inutilizando por consiguiente las muchas preciosidades que éllos te

nian, y las que allí dexaron ence-, rradas los franceses y traydores: españoles despues de su apresurada fuga por la batalla de Vitoria. Así que por este lado ya parece no quedaba obstáculo para que, nuestras tropas y las aliadas bienreunidas y combinadas entrasen en Francia.

Todas las voces que corrian eran igualmente de que Napoleon habia sido destruido en el Norte. Deseábase por momentos la confirmacion que por primera se dió de unos y otros sucesos en la gaceta siguiente extrordinaria de Madrid del martes 16 de noviembre de 1813.

-"Los aliados del Norte y los de, la península acaban de echar el sello á la libertad de la Europa. Las siguientes noticias que damos