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niciones para la dicha conquista, sin que el dicho don Francisco Pizarro pusiese cosa alguna, porque no la tenía ni la poseía, y acababa de llegar pobre y necesitado de los reinos de Castilla.

11. Si saben que, demás de lo susodicho, el dicho don Diego de Almagro convocó y juntó muchos amigos y aliados suyos que estaban en el dicho reino de Tierra Firme, para que viniesen á se hallar en la dicha conquista con sus personas y haciendas, con cuya persuasión vinieron muchos y ayudaron y socorrieron á otros con sus haciendas para que viniesen á ello, sin que fuese nescesario quel dicho don Diego de Almagro les diese ningún socorro á éstos.

12. Si saben que, si el dicho don Diego de Almagro no ayudara, como ayudó, con su persona é industria, diligencia é hacienda para la dicha conquista y descubrimiento del Pirú, no se hiciera, ni el dicho don Francisco tenía caudal ni orden para la hacer, por ser, como está dicho, pobre, y el dicho don Diego de Almagro el más rico que á la sazón había en el dicho reino de Tierra Firme, y demás amigos y allegados.

13. Si saben que en seguimiento de la dicha conquista, con los navíos y gente, bastimentos, armas y municiones quel dicho don Diego de Almagro juntó, salieron del puerto de Panamá y llegaron á la costa del Perú, y en pocos días poblaron en el puerto de Tanagarora, y de allí subieron al valle de Cajamarca, donde hallaron á Ataualpa con ejército formado que llevaba contra Guáscar, su hermano, al cual acometieron y desbarataron y prendieron, sin que el dicho Ataualpa ni la gente que con él iba hiciese resistencia ninguna de armas.

14. Si saben que, demás de lo que ansí hallaron y tomaron al dicho Ataualpa y á las personas que con él iban, el dicho don Francisco Pizarro le pidió al dicho Ataualpa le diese cantidad de oro y plata para él y para sus hermanos y las demás personas que consigo traía; el cual se lo dió en más cantidad de un millón, lo cual hobieron en sí el dicho don Francisco Pizarro y los demás sus hermanos, y tuvieron en su poder, sin cuenta ni razón, más de lo que ellos dijeron.

16. Si saben quel dicho don Francisco Pizarro prendió al dicho Ataualpa, y sin causa le hizo cortar la cabeza y se la cortaron, habiendo ofrecido el dicho Ataualpa de que, porque no le matasen, serviría á Su Majestad con más de seis millones de oro y plata; lo cual se dijo y trató que había fecho el dicho Francisco Pizarro porque el dicho Ataualpa no

dijese y descubriese el oro y plata que le había dado, cuando el dicho Ataualpa fuese á Castilla, como le pedía que le enviasen, y la mayor parte dellos que en su prisión se hallaron habían acordado que se hiciese.

17. Y si saben que de la muerte del dicho Ataualpa y de no haberse cumplido lo que le pidió y los dichos capitanes acordaron, sobre que lo enviasen á Su Majestad, resultó notable daño é inconveniente al bien de los dichos reinos del Pirú, conquista, descubrimiento y sosiego dellos, porque, demás de haberse perdido los dichos seis millones que ofrecía, resultó de allí haberse quedado encubiertos todos los secretos y tesoros de la dicha tierra y el odio y aborrecimiento que los naturales della tomaron contra los conquistadores y demás españoles que á aquella tierra fueron y después han pasado.

18. Si saben que ansimismo el dicho don Francisco Pizarro hizo matar á los que con él iban, mataron más cantidad de diez mill indios de los que se hallaron con el dicho Ataualpa, sin hacer ellos resistencia ni dar ocasión á ello.

por

19. Si saben que, demás de la desorden y excesos que en lo contenido en las preguntas antes desta hubo de parte del dicho don Francisco Pizarro en la dicha conquista, desde quél y los que con él iban entraron en la bahía de San Mateo, y adelante, siempre fueron tomando las mujeres, hijas ó hijos de los indios donde pasaban, llevándolos en colleras, corrompiendo las hijas y quitándoles las mujeres, y matando muchos dellos sin causa, y tomándoles y robándoles sus bienes, y haciéndoles otros muchos malos tratamientos, contra todo lo proveído por Su Majestad en la capitulación é instrucciones que se dieron al dicho don Francisco Pizarro para la dicha conquista, con notables ofensas del servicio de Dios Nuestro Señor y desacato y menosprecio de lo que se le mandaba hiciese en la dicha conquista.

20. Si saben que ciertos capitanes del dicho Ataualpa, de temor que los matasen como al dicho Ataualpa, dieron noticia al dicho Francisco Pizarro del gran tesoro que había en la guaca de Pachacama, cuatro leguas de donde al presente está fundada la ciudad de los Reyes, y que le guiarían para que lo sacase, y que les diese persona que fuese á ello y que ellos le guardarían y guiarían; y así el dicho don Francisco Pizarro nombró á Hernando Pizarro, su hermano, para ello; el cual fué con los dichos capitanes y sacó de la dicha guaca más de quinientos mill

pesos, los cuales tomaron para sí los dichos don Francisco Pizarro y Hernando Pizarro y los demás sus hermanos.

21. Si saben que, al tiempo y sazón que se vino á la dicha conquista de los dichos reinos del Perú, Su Majestad proveyó y mandó que de todo lo que se hobiese de la dicha conquista se le había de dar y diese la mitad, y lo demás restante se quintase, como se contiene en las cédulas y provisiones que sobre ello se dieron.

22. Si saben que de todo lo contenido en las preguntas antes desta, que se hubo de la prisión del Ataualpa en Cajamarca, y todo lo que él después dió de su voluntad, y de todo lo que se sacó de la guaca de Pachacama, y de todo lo que después se hubo en el Cuzco, al tiempo que se entró y conquistó, ninguna parte se dió ni hubo Su Majestad, como rey y señor de los dichos reinos, sino sólo los derechos de la marca que se echó en alguna poca suma y cantidad que se marcó y quintó, lo cual no es parte, pues aquello es dinero que se queda en el valor de lo que se marca.

23. Si saben que, sabido por Su Majestad lo quel dicho adelantado don Diego de Almagro había hecho en lo contenido en las preguntas pasadas, le hizo merced y le nombró por gobernador de la provincia de la Nueva Toledo, la cual mandó que comenzase á correr acabadas las doscientas leguas de gobernación del dicho don Francisco Pizarro, que acababan catorce leguas antes de llegar á la ciudad de Guamanga, yendo desde la ciudad de los Reyes á ella, de lo cual se le envió título y provisión de S. M.

24. Si saben que en la dicha gobernacion de la Nueva Toledo entra la ciudad de Guamanga, Cuzco, Arequipa, Collao, Paz y la Plata, y así el dicho don Diego de Almagro fué rescibido por tal gobernador en ellas, quieta y pacíficamente, sin contradición alguna, y usó de la dicha gobernación y administración de justicia.

25. Si saben que, agraviándose el dicho don Francisco Pizarro de que en la gobernación del dicho don Diego de Almagro entraba lo más principal del Pirú, por entrar la dicha ciudad del Cuzco y provincia del Collao, el dicho don Diego de Almagro vino con él en concierto de que lo viesen y midiesen pilotos, y nombraron á Francisco Cansino y á otros, los cuales lo vieron y midieron y declararon correr la dicha gobernación de la Nueva Toledo desde catorce leguas desta parte de Guamanga, yendo de la ciudad de los Reyes para ella, y entrar en ella la dicha ciudad del Cuzco y provincia del Collao é Charcas.

26. Si saben que, entendido por los dichos don Francisco Pizarro y Hernando Pizarro y sus hermanos el parescer de los dichos pilotos, y como el dicho don Diego de Almagro estaba rescibido por tal gobernador en el Cuzco, y con esto no podían conseguir su pretensión, quera poner en sus cabezas lo mejor y más principal de toda la tierra, que era lo que se incluía en la gobernación de la Nueva Toledo, acordaron de se la quitar al dicho don Diego de Almagro por fuerza de armas, como lo pusieron luego por obra.

27. Si saben que, para el dicho efeto, el dicho don Francisco Pizarro envió al dicho don Hernando Pizarro, su hermano, á la ciudad del Cuzco con mucha gente, amigos y aliados suyos, armados para el dicho efecto, dándole título de teniente general suyo, sabiendo questo no podía proveer en la dicha gobernación, por estar á cargo del dicho don Diego de Almagro.

28. Si saben que, sabida y entendida por el dicho don Diego de Almagro la pretensión del dicho don Francisco y Hernando Pizarro, le prendió, sin hacerle otro mal ni daño alguno, le trajo en su compañía, haciéndole muy buen tratamiento como amigo y como hermano del dicho don Francisco Pizarro, su compañero.

29. Si saben que, sabido por el dicho don Francisco Pizarro la prisión del dicho su hermano, escribió al dicho don Diego de Almagro le soltase y que se viesen y tratasen de nuevo á fijar y asentarse amistad y compañía y hermandad que habían tenido y tenían, pues aquella había de durar cuanto viviesen y durasen, y para esto le envió sus mensajeros, lo cual el dicho don Diego de Almagro aceptó y cumplió.

30. Si saben que el dicho don Diego de Almagro bajó á verse con el dicho don Francisco Pizarro y trajo consigo al dicho Hernando Pizarro, y, vistos, hicieron de nuevo amistad y compañía y confederación, con pleito homenaje de no lo quebrantar en tiempo alguno, con pena de doscientos mill pesos para la cámara de Su Majestad, los cuales pagase la persona que lo quebrantase; declaren los testigos ante quién y cómo y en qué lugar pasó lo susodicho, en particular, aunque no se les pregunte.

31. Si saben que, confiado el dicho don Diego de Almagro de la amistad y compañía y pleito homenaje que habían hecho, como se contiene en la pregunta antes desta, se despidió de los susodichos para volver a su gobernación; y acabado de partir, luego los dichos don Fran

cisco Pizarro y Hernando Pizarro comenzaron á juntar gente y convocarla para ir contra el dicho don Diego de Almagro; y ansí juntó más de seiscientos hombres armados y aderezados para el dicho efecto, con los cuales salió el dicho Hernando Pizarro por su capitán general, con título de teniente general del dicho don Francisco Pizarro, su hermano, por cuya orden y mandado se hacía.

32. Si saben que al tiempo y sazón quel dicho adelantado don Diego de Almagro supo quel dicho Hernando Pizarro iba contra él, hizo, para resistir, junta de gente á costa de Su Majestad y le envió á requerir á él é á el dicho don Francisco Pizarro con la paz y amor y amistad que entrellos estaba capitulada, y les protestó todas las demás muertes, robos y gastos que en la dicha guerra y discordia se siguiesen, en la cual el dicho don Diego de Almagro gastó todo el oro y plata que Su Majestad tenía en el Cuzco y él había traído de las provincias de Chile, que fueron más de cuatrocientos mill pesos.

33. Si saben que siendo el dicho Hernando Pizarro con la dicha gente, y el dicho don Diego de Almagro estando salvo y seguro con la buena fe del pleito homenaje y escripturas que habían fecho, dieron de sobresalto en las Salinas contra el dicho don Diego y le mataron mucha gente y prendieron al dicho don Diego de Almagro, y el dicho Hernando Pizarro le llevó preso y en prisiones en su poder á la ciudad del Cuzco, donde le metió y puso en una fortaleza aprisionado con mucha guarda y recaudo.

34. Si saben que luego quel dicho Hernando Pizarro prendió al dicho don Diego de Almagro, escribió al dicho don Francisco Pizarro, su hermano, lo que había pasado, para que le mandase lo que había de hacer, el cual le mandó que cortase la cabeza al dicho don Diego de Almagro y que se estuviese allí por teniente de gobernador suyo, y así lo hizo, porque luego cortó la cabeza al dicho don Diego de Almagro y se hizo rescibir en el cabildo por tal teniente general de gobernador, de que resultó notable daño y escándalo en estos reinos y con que se dió principio á todos los males y daños que en ellos ha habido hasta aquí.

35. Si saben que, demás de haber preso y muerto el dicho Hernando Pizarro al dicho don Diego de Almagro y de haberse hecho recibir por tal teniente de gobernador, alzó y tomó en su poder todos los bienes y haciendas del dicho don Diego de Almagro, que eran más de quinientos mill pesos, sin inventario ni razón alguna.

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